JESUCRISTO HA RESUCITADO, EN VERDAD RESUCITO.

La Resurrección es un mensaje de vida para la existencia humana.

Por. Jose Alvaro Cardozo Salas.

Este es el grito de hoy domingo día del señor, después de estos dos días de experiencia intensa de la vida de Jesús, la resurrección es algo que siempre me ha cuestionado, imagínese que un familiar o amigo muere, usted lo ve muerto, luego va a la velación y acompaña a la familia al cementerio, es mas ve cuando es sepultado y al regresar a casa dos días después lo ve en la sala tomando tinto, que susto, algo así les paso a los apóstoles.

La resurrección es el gran triunfo de Jesús sobre la muerte, es la oportunidad que se nos da con certeza que tenemos una tierra nueva, un cielo nuevo, la vida eterna es una realidad, los episodios que leeremos esta semana a partir del lunes de pascua son los llamados la Octava de pascua, es decir un domingo que se hace repetible toda la semana, nos afianzaran la fe del resucitado.

En la mañana algunas de las mujeres fueron temprano al sepulcro y lo encontraron vacío, regresaron a contarle a los discípulos quienes verificaron que en verdad no estaba, vieron y creyeron, recordaron lo que tanto les anuncio en vida, que debía padecer, ser sometido a un juicio político, luego crucificado muerto y sepultado, lo que no contaban sus contradictores era en la resurrección.

Los discípulos de Emaús tuvieron una experiencia de el mismo día cuando regresaban a casa, el mismo Jesús se les hizo el encontradizo compartieron y comentaron los últimos acontecimientos, al final del día, y haciendo que seguía fue invitado a pasar la noche con ellos y ahí en la mesa, al partir del pan se les revelo, en verdad se dieron cuenta que había resucitado.

El hombre de hoy no espera que el hombre nuevo surja del cielo. Intenta crearlo con los medios que las ciencias y la manipulación biológica le suministran. En nuestros días el experimento-humanidad está ya funcionando: las manipulaciones para conseguir el control de la natalidad, la inmunización contra enfermedades genéticas, los trasplantes de órganos y tejidos, la inseminación artificial, que en los EE. UU. alcanza a 25.000 casos por año, la creación de embriones in vitro como los célebres experimentos de los profesores Daniele Petrucci de Bolonia y de Landrum Sheteles de la Universidad de Columbia, la manipulación genética esta a la orden del día, no deja nada distinto a un reto y no someternos al mandato divino.

Ante tales experimentos, quedan vacíos los conceptos clásicos de la moral. No parece practicable una prohibición plena del experimento-humanidad.

Desde el tiempo de los apóstoles hasta nuestros días la fe en la resurrección ha sido puesta en cuestión. La certeza que la Iglesia posee es una certeza de fe. Se nota una constante en los relatos a propósito de la resurrección: el sepulcro vacío y las apariciones no son de tal naturaleza que excluyan la duda.

En los últimos años se ha desencadenado una gran discusión, tanto en la teología protestante como en la católica, acerca del significado de la profesión de fe «Dios lo resucitó (a Jesús) de entre los muertos» (Hch. 3,15; 4,10). Se asumieron posiciones radicales y esto provocó fuertes reacciones dentro de las comunidades.

La Resurrección es un mensaje de vida para la existencia humana. La muerte fue vencida definitivamente por la cruz y por eso hizo irrupción un gran sentido en nuestra vida, que cada año al conmemorar estas fiestas pascuales, retumban en nuestros oídos y en los corazones, recordándonos una y otra vez el amor incondicional de un Dios que nos amó al extremo, tanto que nos ofrendo a su propio hijo para salvarnos.

La Resurrección no es un mito del que se pueda decir que «nunca sucedió y sin embargo existe» es real, es todo un misterio de amor, que nos mantiene con vida y renueva nuestra fe, que gracias a estos hechos de hace mas de 2000 años se hacen vida en nuestras vidas, felices pascuas.